Después de pasar un fin de semana estupendo en Buenos Aires ( gracias chicos: Petoto, Coco y Juan) nos dirigimos a Mar del Plata en la provincia de Buenos Aires. Seis horas de autobús (495 Km) y llegamos al hostel. Mar del Plata es una ciudad de veraneo para argentinos y extranjeros con numerosas playas. Nosotros nos decidimos por Playa Escondida a unos 10 Km al Sur. Ese día hacía mucho viento pero aún así fuimos. Una de las pocas playas nudistas de este país.
A la vuelta dimos un paseo por el puerto viendo los primeros leones marinos de nuestro viaje. Estaban muy cerca casi al alcance de nuestra mano.
Y pudimos contemplar un montón de fragatas que se encontraban en el puerto. Continuamos nuestro viaje a Puerto Madryn para visitar la Península de Valdés famosa por su reserva de leones marinos, pingüinos y elefantes marinos. Esta vez 16 horas de autobús ( 1237 Km ).
Contratamos una excursión a la Península de Valdés. Este es un esqueleto de ballena, impresionante!!
Así es la Patagonia austral, puro desierto. Aquí apenas llueve y no existe vegetación a excepción de algún matorral y pasto que sirve de alimento a las ovejas y las llamas patagónicas que pudimos ver a lo largo de toda la visita de la península. La población es reducidísima, apenas unas pocas estancias dedicadas al ganado. Aquí la electricidad y el agua son escasas. El único pueblo existente es Puerto Pirámides y el único que sirve combustible a toda la Península.
Y continuamos recorriendo la península para ver los elefantes marinos aunque quedaban ya pocos ejemplares...
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